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viernes, 26 de abril de 2013

Donde dije digo, digo diego...

Así van las cosas. Tratas con personas, bueno tal vez lo de personas es el eufemismo del siglo. Ser persona tiene unido una serie de características, una cierta coherencia, unas ideas base que generan las demás. Aquí llega la cuestión. ¿Eres una persona por tener voz, dos piernas, dos brazos y cierta capacidad para defender tus intereses?.... Yo creo que no. Así van las cosas. Uno es sincero, manifiesta las condiciones, a priori, para que no quepan dudas sobre lo que significa decir "SI, ESTOY DE ACUERDO, ACEPTO".... ¿en qué queda?.... Pues que el individuo dice SI, pero en su interior plantea las condiciones de ese SI, no te las dice lógicamente, porque piensa que ninguna de las condiciones pudiera llevarse a la práctica, vamos que seguramente no será necesario ponerlas sobre la mesa, pero ¿qué pasa si tuviera que pedirlas, es decir, comentar que su SI tenía condiciones. Pues que claro, que yo le voy a decir que las condiciones se ponen sobre la mesa, las contraofertas, también y ambos, con toda la información dicen SI o NO y tan amigos. Ahí está el problema. Cuando la segunda parte miente, admite "fálsamente" que acepta las condiciones, aunque es de tapadillo, porque está desesperado, o simplemente, como digo, sus contracondiciones no cree que vayan a ser usadas, y qué pasa cuando si tiene que usurlas, pues que lo dice como si la negociación la hubiera hecho totalmente con sus contracondiciones. Cuando se le replica, la hemos cagado.... cuando se le dice que nada de lo que pide o vamos, cuando EXIGE, se le recuerda que eso no fue lo negociado, te trata a ti de mentiroso, de falso, de que ya te vale por tener unas condiciones, y que lo que pide o exige nunca fue puesto sobre la mesa, y peor, que si así lo hubiera hecho, yo le habría dicho que FIN DE LA NEGOCIACIÓN... Hasta que no me planté, mientras me mostré comprensivo y traté de echar una mano, todo eran buenas palabras, y que soy el mejor, y superbueno, etc, etc, como digo así, hasta el instante del plante, del HASTA AQUÍ, ahí la cosa cambia.... se acabó la cortesía por su parte, ahora tocan las amenazas, los insultos, las falta de formas......, etc etc etc.... ¿A alguien le suena?......

domingo, 21 de abril de 2013

La historia de KV Switzer

Ella desafió las normas establecidas cuando en 1967 se convirtió en la primera mujer en correr una maratón, una prueba, hasta ese momento, exclusivamente para hombres. Para ello se inscribió como KV Switzer y cruzó la línea de salida con el dorsal 261 como si fuera un corredor más. Pero Kathrine pasó a la Historia cuando uno de los jueces a mitad de la carrera se dio cuenta y saltó tras ella para detenerla, pero el resto de corredores se lo impidieron y la “escoltaron” para que pudiera terminar la carrera, con un tiempo de 4 horas y 20 minutos. Este es uno de los momentos inolvidables de la historia de los maratones y el deporte femenino que quedó para el recuerdo gracias a esta espectacular fotografía. -Austen-