Las Pesquisas de Marcello 20/02/07

OPINIÓN RECOGIDA DEL DIARIO ESTRELLA DIGITAL 20/02/07.

LAS PESQUISAS DE MARCELLO


Váyase, señor Acebes


No podemos más, es insufrible por mucha pena que dé, pero ha llegado la hora de que Ángel Acebes regrese a Ávila o se esconda en la cajita del reloj digital del PP en calle Génova. Lo que sea, por el bien del Partido Popular, ¡por España!, que diría Fraga, don Manuel; pero hijo, Acebes, déjalo ya, echa una mano y no insistas, porque cada vez que sales en televisión el PP pierde mil votos o más y cada día que pasa sale algo que pone en evidencia al PP por causa de la gestión de Acebes a su paso sordo por el Ministerio de Interior. Porque el pobrecito no se enteraba de nada, no mandaba nada, le tomaban el pelo la pasma, los canarios del CNI y todo el que pasaba por allí. Y así no se puede ir al Parlamento y luego interrogar al Gobierno sobre lo que pasó en su despacho de Interior, que es lo que hacen con el 11M, y lo que ha hecho Rajoy con Guantánamo, al estilo de Cuéntame lo que pasó cuando nosotros estábamos allí, porque no nos acordamos de nada, amnesia total.

Lo de Acebes es muy grave porque además sólo se preocupa por salir en la televisión, usurpando el cargo de portavoz del partido que le corresponde a Elorriaga —otro que no da la cara—, y del que se ha apoderado Acebes en vez de ocuparse de la organización del PP, de las provincias y autonomías, que apenas pueden hablar con Génova porque a las diez de la noche, como las gallinas, ya está apagada la luz. Pero nada, el de Ávila ni se inmuta, sigue ahí con todos los entorchados de secretario general sin dar un palo al agua, para decir todos los días que Zapatero, el Gobierno y el PSOE son muy malos, y eso es todo, ni una idea, ni un argumento, ni siquiera un titular, y eso que ahora le escriben unos folios ininteligibles y luengos como las barbas de Matusalén, y ahí está leyendo el tal Acebes su letanía del lunes para lucirse en prensa, radio y televisión.

El asunto Acebes no es para tomárselo a broma sino algo muy serio, porque acaba de salir lo del envío de policías españoles (y diplomáticos) a la cárcel ilegal y al tiempo torturadora de Guantánamo cuando él era ministro, y sigue tan campante, escondido tras la ancha y ambiciosa espalda de la rana Gustavo de Arístegui, que está enfadado porque lo hemos cazado sin el pantalón, democráticamente hablando, y encima va diciendo por ahí que el comentario era insultante. Vamos a hacer un inciso a favor de Gustavo, el diputado más dichararachero del PP: mira, Gustavo, lo insultante, lo ilegal y también lo mortífero han sido tus mentiras sobre la guerra de Iraq y armas de destrucción masiva, o tu bochornosa declaración sobre la infamia de Guantánamo, donde se han pisoteado las libertades, el Derecho y la dignidad. No sé, Gustavo, ni cómo te atreves a decir ni pío, en una democracia como Dios manda ya estarías fuera de la política, y Acebes también.

Pero vamos con Acebes, que es lo suyo. Este personaje no ha dado la cara ni dijo nada sobre su responsabilidad por el envío de policías a Guantánamo y estamos a la espera. Ha insinuado que él no sabía nada, pero si es así peor todavía, porque no sabía nada de eso, ni de la UCO, ni de la trama asturiana de la dinamita del 11M, ni mandó traducir las cintas sobre los implicados en la masacre de Madrid, y mintió diciendo que seguían por igual la pista de ETA y Al Qaeda tras el atentado del 11M, e incluso una vez que le informaron —como ocurrió en la mañana del 13M— que iban a detener la comando islámico. Y luego dijo que ya estaba todo claro, y después se ha sumado a la teoría de la conspiración de la mano de Zaplana, el que le ha colocado a una espía rusa debajo de su sillón.

Y por si algo faltara resulta que Acebes es el que legalizó al PCTV, porque el pobre no había investigado a las siete novias de Otegi, y ahora es el mismo que pide que ilegalicen lo que él legalizó, lo que ya es el colmo de la idiotez política y una irresponsabilidad para dejar, por una u otra cosa, todos los días al PP en ridículo y en la contradicción. Y el tío sigue ahí, erre que erre, y no hay quien lo saque del cargo ni con agua caliente, y tiene la casa —o la organización del partido— manga por hombro y sin barrer.

Y si alguien se atreve a decirle que se lo piense y dé un paso atrás, por el bien del PP, se sube a la chepa de Zaplana —el Pichi del PP— y se coge un avión del Pocero o de quien sea y se va a Cádiz a hacerse una foto y vestirse de liberal, cuando lo suyo sería lo de los “siete magníficos de Fraga”, pero en el papel de flecha y aprendiz. Y en pago por las fotos de El Mundo y los aplausos del mandril de la COPE, el tal Acebes se dedica a hacer gestiones —en licencias y todo tipo de ayudas— a favor de estos dos medios de la gran conspiración y, claro está, en contra de todos los demás, competencia desleal. Y digo yo, ¿qué hace un secretario general del PP metido en esos vericuetos y, por ejemplo, apoyando desde la oscuridad una brutal agresión al diario ABC y a su director?

Si es que no hay por donde cogerlo, pero lo de ayer con lo del PCTV que legalizó él, y lo de Guantánamo, el 11M, y su paso por Justicia e Interior ya es demasiado, por más que Rajoy sea incapaz de tomar una decisión. Bueno, si al menos se dedicara al partido, a la organización, a atender a los pueblos y a los militantes, todavía. Pero no, Acebes lo que quiere es salir en televisión y hundir al PP, ponerle lastre a Rajoy en la alas para que no vuele y se estrelle, porque a lo mejor le ha dicho Zaplana que eso es lo mejor. En fin ¡váyase, señor Acebes!, de una vez. ¡Por España! y por el PP, aunque el PSOE lo eche de menos, qué le vamos a hacer.