Miércoles, 3 de mayo de 1944
Con frecuencia he estado abatida, pero nunca desesperada. Considero esta vida clandestina como una aventura peligrosa, pero romántica e interesante. Me consuelo de las privaciones entreteniéndome en describirlas en mi diario. Me he propuesto llevar una vida diferente de las otras chicas, y después, de las amas de casa corrientes. Este es un buen comienzo de una vida interesante, y por eso, aun en los momentos más peligrosos, tengo que reírme del lado humorístico de la situación. Soy joven y poseo muchas virtudes aún escondidas, soy joven y fuerte y vivo esta gran aventura, estoy en pleno centro, y no puedo pasar el día lamentándome. La naturaleza me ha favorecido dándome un carácter feliz, jovial y enérgico. Cada día siento que mi mente madura, que la liberación se avecina, que la natruleaza es bella, que la gente en torno a mí es buena y que esta aventura es interesante. Luego, ¿por qué tendría que desesperarme?
He querido hablar muchas veces de la experiencia que tuvo que pasar esta niña, toda su familia, y muchos de los 40.000.000 millones de personas que mataron en la segunda guerra mundial. Anne Frank es la imagen de dicha experiencia, de la huída, de la represión, de los campos de exterminio, de lo peor que podemos llegar a ser los seres humanos. He preferido poner un día cualquiera para ella, ya que es reveleador observar como era el mundo a través de su pluma
¿y tú qué opinas?
un saludo desde áfrica
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