Aunque mi estado de ánimo no sea el más adecuado para tratar temas importantes, ya que tengo la cabeza y el alma sucumbidos en temas personales, hoy no puedo utilizar esto en contra de una realidad imperante.
La sociedad en la que vivimos tiene miedo. Tiene un gran desconocimiento. Está sometida al yugo de lo que dicen otros. En grupo funciona más cómoda.
Hoy, mientras me dedicaba a mis cosas, pude ver de refilón la noticia de que un hombre había sido exonerado por una prueba forense. Un hombre al que hace unos días todos iban a ir a linchar.
Me vienen a la mente varias frases de la filosofía humana:
- Ojo por ojo y diente por diente.
- Serás inocente hasta que se demuestre lo contrario.
- Di todo lo malo que quieras, que algo, siempre queda.
- Coge fama y échate a dormir.
- La ley es igual para todos.
- Dios aprieta pero no ahoga.
etc etc etc.
Aitana no murió por un trágico accidente.
Aitana no murió porque los servicios de sanidad que la atendieron no detectaron lesión grave alguna.
Aitana no murió porque alguien la torturara y violara.
¿De qué murió Aitana, entonces?, ¿mala suerte?
Diego, desde aquí, lamentar enormemente tu situación. Navegando entre las sensaciones de sentir culpable porque eras tú quién cuidaba de Aitana, responsable, porque tal vez pudiste hacer algo más en los servicios médicos, impotente porque nada la podrá hacer volver a la vida, frustrado porque todos te creimos culpable de violador y asesino, en definitiva hundido porque quién puede soportar todo esto.
Recuerdo oir como muchos se pusieron en contra de la madre de la niña que salió en tu defensa, yo mismo entre ellos. Todos nos imaginamos la típica situación, todos creimos sin dudarlo los titulares, y estoy seguro que pensamos en otra madre irresponsable.
Cuánta vergüenza siento de mi falta, no puedo sino criticarme, y desde aquí poner una nota, un lamento por Aitana y una disculpa por tu persona, tu situación y la de todos tus seres queridos que en este momento tienen que mantener tantos frentes abiertos.
Desde MentesAjenas, comentar que hasta nosotros los que hemos criticado siempre estos jucios de valor, nos hacemos una autocrítica y esperamos no caer tan fácilmente en el error.
un saludo desde áfrica.
¿y tú qué opinas?
Noticia en el mundo
1 comentario:
Completamente de acuerdo con tús palabras Misionero. En esta sociedad en el que nos encontramos se juzga antes a las personas imputadas en un delito en la calle que en una sala de vistas. Los juicios paralelos son una realidad que, en la mayoría de los casos, valen de poco y hacen más complicada una investigación. No se espera a que sean las pruebas y un proceso judicial los que determinen la inocencia o culpabilidad del imputado.
Es triste ver como el principio de presunción de inocencia desaparece en los medios de comunicación y, en consecuencia, en la sociedad.
Es decepcionante ver que no se respeta el secreto de sumario de unas actuaciones judiciales y que en cuestión de horas se publiquen datos de una investigación. Automáticamente se dicta sentencia, sin tener en cuenta que se está hablando de una investigación y no de hechos probados.
Por otro lado, no hay que olvidar la resposabilidad de los facultativos que, mediante sus partes médicos, pusieron en funcionamiento el protocolo de actuación y que, para colmo, no atendieron como era debido a la menor.
Ahora toca pedir disculpas desde muchos ámbitos, pero el daño causado no desaparecerá nunca.
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