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sábado, 12 de junio de 2010

Esperando por unas salchichas...

En cualquier lugar se pueden encontrar situaciones curiosas. Estaba perdido en aquel momento y conseguiste indicarme el camino. No podía oir sin tu ayuda, y no me sentí dependiente, sino aleccionado a mejorar. No Sabía pedir sin llorar a cambio y gracias a tus miradas aprendí a lograrlo entre risas y gozo.

Nunca se sabe, a priori, como vamos a reaccionar a cuestiones simples, o tambien vale para las complejas. Me gustaría concordar varias de esas sensaciones y hacer de ellas un pequeño manual al uso, uno de esos de "entropía para tontos", pero nunca me deja el tiempo, no me lo permite el horario, y quien dice que las cosas tengan que seguir un manual, nunca se puede, nunca se debería dejar de lado la idea de improvisar una de esas situaciones, en las que prepararse, te deja frío, te permite sólo ver un lado de la cuestión, y qué podemos decir del otro. Ahí se queda, como la calle del jugo que me comentas.

Perdidos en divagaciones vacías de sentido, ya que el final se acerca, el momento de desgustar la terrible maldad o la ironía de que nos vamos a quedar con las ganas.

...lo siento, ya llegan las salchichas....

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