Nubes oscuras que amargan la vista.
Sonidos que impiden escuchar.
Comidas que no saben.
No tengo nada para apagar la sed.
Sólo siento pesar.
Allí sumida en ese caos de intenciones.
Sola dentro del bullicio.
Nadie tiene la llave de la solución.
Tocan a tu puerta con regalos.
Invitaciones que hay que rechazar.
Se que hay pena en alguna de las capas.
Muchas victorias a tu espalda, todas con dolor y pérdidas.
Se ganan las batallas, pero a veces, muchas más de las se reconocen, se siente que se pierde la guerra.
¿Para qué luchar, entonces?.
Qué dulce suena la tentación.
Abruman las emociones cuando se piensa en acabar con la guerra.
Así, sin más.
CLAUDICACIÓN.
Tantas veces he practicado delante del espejo.
¿Cuántas veces se habrá dicho?.
RENDICIÓN.
Suena tan familiar, casi tan cercano.
Parece que ya formara parte del interior, sino fuera porque....
Nací fuerte, nací con ansias de lucha, nací para vencer, nací con ganas.
Tengo tanto que dar,
que no voy a dejar que esta situación me diga qué, puedo, o no, hacer con la vida.
Mi vida es mía aunque la cercenen.
Es mía a pesar del dolor que casi no permite vivirla.
Es mía para compartirla contigo.
¿La quieres compartir?....
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