Nada es tan intenso como mirarte, mirar a los demás, y decirte, "soy la leche en verso"....No se trata de decírselo a los demás, de ser un prepotente, de ir por ahí comparándote. Es simplmente un regocijo personal por ver comprobar día a día, persona a persona, situación a situación, que estás tú, y están los otros.
No eres uno de esos otros.
Todos te dirán que eres un chulo, un engreído, un narcisista, pero tu superioridad se basa en tu seguridad en ti mismo, en tu capacidad para saber quién eres, lo que quieres, eres un faro para ti, en ti, y los demás ven esa luz que te guía y lo envidian. Querrían esa luz, pero no saben como conseguirla, piensan que es cosa de mirar hacia fuera y buscarla, de que es otro el que los ha de guiar... ahí está su error, y por lo tanto, ahí está tu mejor posición.
Como escuché una vez, "eres un iluminado", y es porque brillo con luz propia. ¿Qué culpa tendré yo de qué por ahí fuera haya tanta oscuridad para los demás?... ¿Qué no sepan mirar su camino, porque están a oscuras, esperando a que algo o alguien les ilumine su camino.
No voy a disculparme por ser como soy.
Ni voy a pedir perdón, por mirar y ver lo que veo.
No me arrepiento de mis decisiones, las buenas o las malas, fueron las que fueron con la información, la fuerza, las ganas, la tesitura, la situación, lo que había que hacer, o no, pero fue lo que hice.
Sólo puedo mirar hacia atrás con admiración, regocijo, reconocimiento. Y cualquier sentimiento negativo, no es presente, sólo un recuerdo, de dicho momento, y como tal así se vivió.
Un saludo desde África.
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